La temporada navideña es una época común del año para descubrir signos preocupantes de demencia en seres queridos que no vemos regularmente. Puede ser la primera vez que haya notado que un miembro de la familia no es tan inteligente como solía ser. Es posible que los hayas notado actuando un poco distraídos, olvidando cosas que podrías jurar que les dijiste, o estando un poco menos al tanto de lo que solían ser. Si usted es como muchos, esto provocó preguntas como "¿cuáles son los signos de la demencia?" En este artículo, analizaremos algunos de los primeros signos de demencia, para que pueda decidir si vale la pena llevar a su ser querido para una evaluación adicional.
9 primeros signos de demencia
Si le preocupa la demencia, ya sea para usted o para un ser querido, un diagnóstico temprano es crucial para tener la mejor oportunidad de un tratamiento efectivo. Si bien la demencia no se puede curar, hay muchos beneficios ante un diagnóstico precoz.
1. Problemas diarios perturbadores relacionados con la pérdida de memoria
Si bien los olvidos ocasionales son normales a medida que envejecemos, olvidar por completo la información aprendida recientemente o no poder recordar eventos o tareas importantes es uno de los signos más comunes de demencia.
Nuevamente, es normal olvidar ocasionalmente detalles, nombres, etc. a medida que envejecemos. Sin embargo, si no puede recordarlos más tarde o interrumpe la vida diaria, puede ser un signo de demencia.
2. Olvidar cómo hacer tareas rutinarias
Es normal olvidar de vez en cuando cómo hacer las cosas cuando estás distraído u ocupado. Esto puede hacer que se olvide de servir una parte de una comida que preparó, por ejemplo.
Es probable que una persona con demencia olvide o tenga problemas para recordar los pasos de rutina dentro de la preparación misma, es decir, las tareas de rutina que ha realizado docenas de veces antes.
3. Decir oraciones raras
Es normal olvidar una palabra o tener dificultades para encontrar la palabra correcta para comunicar lo que está tratando de decir.
La demencia, por otro lado, es un poco más severa. Alguien con demencia puede tener dificultades con una conversación completa o inventar sustitutos de palabras sin sentido. Por ejemplo, llamar a una bufanda una "manta para el cuello".
4. Perder la noción del tiempo y el lugar
Un cambio normal relacionado con la edad que puede experimentar es olvidar ocasionalmente el día de la semana (pero luego recordarlo) o perderse conduciendo por nuevos vecindarios.
La demencia, de nuevo, es un poco más grave. Podría ser, por ejemplo, no recordar el camino a casa desde una tienda de comestibles visitada regularmente, o perder por completo la noción de los días de la semana.
5. Dificultad con conceptos abstractos
Todos luchamos de vez en cuando con conceptos que requieren un pensamiento abstracto, como la elaboración de presupuestos. Sin embargo, alguien con demencia puede tener dificultades al mirar números o símbolos de calculadora: se trata menos de recordar cómo equilibrar un presupuesto y más de olvidar lo que significan los símbolos (como los números arábigos o el símbolo de división).
Las asociaciones más concretas también pueden volverse difíciles. Por ejemplo, no se trata solo de olvidar dónde dejaste las llaves del auto. Se trata más de olvidar para qué usan esas llaves del auto.
6. Extraviar artículos
Si bien mencionamos el hecho de que extraviar artículos es una parte normal de la vida y del envejecimiento, hay un nivel de desplazamiento que se vuelve más preocupante.
Extraviar las llaves en el ajetreo y el bullicio de la vida es normal. Poner tus cosas en lugares inapropiados, como las llaves del auto dentro de un bote de galletas o el control remoto de la televisión en la bañera, por ejemplo, puede ser un signo de demencia.
7. Mal juicio
Todos tomamos decisiones malas o dañinas de vez en cuando (como elegir evitar al dentista o prolongar un cambio de aceite muy necesario), pero alguien con signos tempranos de demencia puede tomar decisiones dañinas para sí mismo con más frecuencia.
Es normal posponer la visita al médico. Es preocupante si no se cuidan a sí mismos o usan ropa pesada/voluminosa en un día cálido.
8. Dejar ciertas actividades
Las personas con demencia experimentan dificultad para expresarse y, por tanto, para relacionarse con otras personas. Debido a esto, pueden comenzar a retirarse de las reuniones sociales, los pasatiempos que aman, etc.
Es normal perder interés en cierto evento o no estar interesado en sus obligaciones. No es normal si este retiro se debe a que no puede mantener una conversación.
9. Cambios dramáticos de humor o cambios en la personalidad
A medida que envejecemos, nos fijamos mucho más en nuestras rutinas. Es normal volverse irritable cuando se interrumpe su rutina.
La demencia, por otro lado, se manifiesta más en cambios de humor dramáticos. De sentirse contento a confundido, normal a desconfiado, o de feliz a temeroso.
Próximos pasos si sospecha de demencia
Si leyó esta lista y sintió que lo describía con precisión a usted o a un ser querido, vale la pena consultar con un profesional para un diagnóstico adecuado y descartar una condición médica. La demencia no se puede auto-diagnosticar, por lo que si uno o más de estos resuenan con usted, haga un plan para consultar a un médico.
Pensamientos finales
La demencia puede asustar a la persona afectada y a su familia, pero aun así se puede vivir una vida plena y feliz con demencia. El diagnóstico temprano ofrecerá los caminos más potenciales para el tratamiento, por lo que si sospecha que usted o un miembro de su familia puede tener demencia, consulte a un médico lo antes posible.
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