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5 consejos de vacaciones para cuidadores familiares

Para muchos cuidadores, las vacaciones son la época más estresante del año. Ver a familiares y amigos puede traer a colación toda una mezcla de emociones, no todas las cuales son positivas y alegres. Si bien ver a la familia no es el problema, a veces lo es quien recibe el cuidado. Al cuidar a alguien con un deterioro cognitivo, por ejemplo, puedes tener miedo de que se comporten mal en entornos grupales. Independientemente de lo que esté causando estrés en esta temporada navideña, te ofreceremos cinco consejos para ayudarte. Esperamos que las sugerencias enumeradas en este artículo hagan de la ocasión una experiencia más positiva y alegre para ti y tus seres queridos.


Habla con sinceridad

Ya sea que estés hablando con otros adultos o niños, comunicar honestamente la verdad del asunto puede aliviar la tensión de todos los involucrados. Si, por ejemplo, tu ser querido muestra signos de deterioro físico o cognitivo, puede ser útil avisar a todos. Incluso los niños, cuando se les habla con cariño, pueden tener una experiencia más positiva (y una mejor reacción) como resultado de una comunicación adecuada.


Avisa a tus amigos y familiares de cosas como:

  • Cambios significativos en la apariencia.

  • Posibles arrebatos o comportamiento irracional.

  • Deslices cognitivos, como olvidar los nombres de las personas presentes.

  • Niveles de energía y que esperar cuando se cansan

  • Necesidades alimentarias, si hay alguna inquietud dietética especial a considerar

  • Etc.

Establecer límites

Al decidir cómo desea presentarse en esta temporada navideña, respeta tanto tus niveles de energía como los de tu ser querido, y establece los límites. Considera esto como tu hoja de permiso si la necesitas: no tienes que decir "sí" a cada invitación.

Coloca tus invitaciones y planes tentativos en el calendario y echa un vistazo crítico. ¿Tu horario te parece razonable y factible para ti y el ser querido bajo tu cuidado? Si no es así, es hora de priorizar. Considera cosas como:

  • El tamaño del evento. ¿Puede tu ser querido manejar la interacción a ese nivel, o preferiría y reaccionaría mejor a una reunión más pequeña?

  • Los invitados importantes. ¿A quién es más importante que vean tu y tu ser querido en esta temporada navideña? ¿Puedes estructurar tu calendario en torno a estas personas?

  • Cuidados de relevo. ¿Puedes encontrar o contratar a alguien para que ocupe tu lugar por una noche para que puedas asistir a una reunión solo sin sentirte culpable?

  • Distancia. Puede que tenga sentido quedarse más cerca de casa en esta temporada navideña, y si ese es el caso, no hay daño ni culpa en rechazar invitaciones lejanas.

  • Momento. Si se planea una reunión en un momento en el que el beneficiario de la atención no está en su mejor momento (por ejemplo, a última hora de la noche), puede ser una buena idea rechazarlo.

Crea nuevas tradiciones

Si tus tradiciones son abrumadoras o ya no son factibles, intenta cambiarlas. Aquí hay unos ejemplos:

  • Si tradicionalmente organizas una gran cena navideña, pídele a otra persona que la organice en su casa este año.

  • Si te gusta caminar hacer recorridos por las decoraciones navideñas o el zoológico local, pero no puedes imaginar a tu ser querido caminando (o empujándolo en una silla de ruedas) tan lejos, encontrar un vecindario con una pantalla de luz que puede ser una buena alternativa.

  • Si normalmente hornean pan de jengibre y construyen casas juntos, tal vez cambies el ajetreo por un rompecabezas navideño este año.

Lo importante durante las vacaciones es pasar tiempo junto a tus seres queridos. Todo lo que se sienta incompatible o perjudicial para ese objetivo debe descartarse.


Toma atajos sin sentirte culpable

Dirígete a la panadería para conseguir una deliciosa bandeja de galletas o pastel. Compra un pastel en Costco. Regala tarjetas de regalo en lugar de regalos. Contrata a alguien para que encienda las luces o reduzca drásticamente la pantalla este año. Ordena una buena cena en lugar de cocinar un banquete. Entiendes la idea.

Este año, no hay vergüenza ni culpa en tomar atajos. Estos atajos pueden brindarte el espacio necesario para mantener el equilibrio y la energía para disfrutar de las vacaciones con las personas que amas.


Acepta ayuda

Si alguien ofrece para ayudarte en esta temporada navideña, acéptala. Dales un trabajo o tarea específica para completar que pueda liberar algo de espacio en tu plato. No es necesario sentirse raro o culpable por aceptar la ayuda que se ofrece. Lo mejor que puedes hacer es apartarte y dejar que te ayuden.


Reflexiones finales sobre consejos para los cuidadores durante las festividades

Las vacaciones son estresantes, seas cuidador o no. Pero ser cuidador agrega un nivel de estrés que pocos parecen comprender. La buena noticia es que no estás solo. Existen millones de cuidadores en el mismo barco en estas fiestas.


Dónde encontrar más información

Si brindas atención regular a tu ser querido, en CRC OC estamos aquí para ayudarte. Te invitamos a consultar nuestra biblioteca de información para cuidadores familiares haciendo click aqui para más lecturas y recursos. También puedes llamarnos al 800-543-8312 para obtener más información sobre cómo podemos ayudarte en tu viaje como cuidador.

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