Si has estado brindando atención durante un tiempo, es posible que comiences a experimentar signos y síntomas de agotamiento. Desafortunadamente, esta es una experiencia común para los cuidadores, ya que muchos brindan atención durante períodos prolongados (varios años, en promedio) con poco o ningún apoyo o indulto. Como resultado, el sentimiento de agotamiento puede comenzar a aparecer. Exploremos qué es el agotamiento del cuidador, qué lo causa y cómo se siente.
¿Qué es el agotamiento del cuidador?
El agotamiento del cuidador es cuando un cuidador ha alcanzado un estado prolongado de agotamiento físico y mental. A menudo se caracteriza por un cambio en el estado de ánimo y la percepción, como si ya no se sintiera positivo acerca de la atención que le está brindando a su ser querido como antes.
De acuerdo a WebMD, "Los cuidadores que están ‘agotados’ pueden tener fatiga, estrés, ansiedad y depresión". Los cuidadores son especialmente propensos a sufrir agotamiento debido al constante estrés al que están sometidos. Muchos cuidadores también se sienten culpables al preocuparse por sí mismos y les resulta difícil pedir o aceptar ayuda.
¿Cuáles son las causas del agotamiento en los cuidadores?
Hay muchas causas potenciales de agotamiento, pero algunas de las más comunes para los cuidadores incluyen:
● Confusión sobre su rol
Muchos cuidadores asumen inesperadamente el papel de cuidadores. Puede ser un deslizamiento gradual hacia el rol (es decir, asumir lentamente más responsabilidades a medida que el ser querido a su cuidado muestra signos de necesitar ayuda), una necesidad repentina (como un diagnóstico repentino y un plan de tratamiento, como suele ser el caso de cáncer y quimioterapia) o lesión.
De cualquier manera, es muy común que el rol de cuidador nunca se discuta formalmente con el ser querido a su cuidado o con otros miembros de su familia. Esto puede provocar sentimientos de confusión y frustración.
De manera similar, puede ser difícil separar su rol de cuidador de los otros roles que puede desempeñar (como cónyuge, empleado, madre, amigo, padre, vecino, etc.) que también pueden causar confusión, resentimiento y frustración.
● Expectativas demasiado altas
Muchos cuidadores comienzan a brindar cuidados con la expectativa de ver un cambio notable en la persona como respuesta a su cuidado o que de alguna manera podrán curar a su ser querido. Esto proviene de un lugar positivo y esperanzador, pero finalmente deja al cuidador decepcionado (y puede hacer que sienta ganas de darse por vencido).
Es importante recordar que, especialmente en casos de enfermedad crónica o progresiva (como la demencia), esto no es posible. Sin embargo, lo que es posible (y lo que está haciendo) es prolongar su independencia y mejorar su calidad de vida.
● Bajo control y recursos
En el camino del cuidado, habrá muchos desafíos. Mantener organizada la atención de su ser querido (como citas con el médico, tratamientos/información de recetas, etc.) administrar las facturas o encontrar los recursos para pagar todo puede ser extremadamente agotador mentalmente.
Junto con este problema está que a menudo los cuidadores tienen expectativas poco realistas para sí mismos, o tienen expectativas poco realistas que otros les imponen. Esperan (o se espera) poder manejar todo por sí mismos y/o pueden tener dificultades para liberar el control cuando se les ofrece ayuda. Todo esto puede conducir a un agotamiento final cuando el nivel de atención esperado es inalcanzable.
Síntomas del agotamiento del cuidador
Hay muchos signos y síntomas del agotamiento del cuidador, todos tienden a imitar los signos del estrés, la depresión y la ansiedad (razón por la cual están fuertemente correlacionados). Esta lista pretende ser útil, pero no es exhaustiva.
● Tienes mucha menos energía de la que tenías antes.
● Parece que siempre coges un resfriado o una gripe.
● Estás constantemente muy exhausto, incluso después de dormir o tomar un descanso.
● Descuidas tus propias necesidades, ya sea porque estás demasiado ocupado o simplemente ya no te importa.
● Todo en tu vida gira en torno a tus responsabilidades como cuidador, pero a cambio te genera poca satisfacción.
● Tienes problemas para relajarte o dejarte llevar, incluso cuando hay ayuda disponible y para ser utilizada.
● Estás cada vez más impaciente e irritable con la persona a la que cuidas y, a veces, no puedes deshacerte de tu frustración.
● Te sientes desamparado y desesperado.
(Fuente)
Pensamientos finales
Cuidar a otro es un viaje maravilloso y gratificante, pero también increíblemente estresante. Hoy en día, hay millones de cuidadores en los EE.UU. que experimentan los mismos pensamientos, culpas, temores y muchos de los mismos desafíos que tu. No tienes que hacerlo solo y no estás solo.
Si brindas atención regular a su ter querido, en CRC Orange County estamos aquí para ayudarte. Te invitamos a consultar nuestra biblioteca de información para cuidadores familiares haciendo click aqui para más lecturas y recursos. También puedes llamarnos al 800-543-8312 para obtener más información sobre cómo podemos ayudarte en tu viaje como cuidador.